Miles de mujeres son víctimas de organizaciones criminales que las obligan a pagar cupos por dejarlas trabajar en las calles, o las traen desde el extranjero para obligarlas a prostituirse en las ‘plazas’ que controlan. Para salirse hay que terminar de pagar la ‘multa’ y traer a otra mujer para que ocupe ese lugar.
El Estado debe rendir cuentas ante el Congreso sobre sus acciones de prevención y lucha contra la trata de personas. La última vez que se dio esa rendición fue en mayo de 2017. Tu firma puede hacer la diferencia.