Entregar hijos a “padrinos” pone a niños en riesgo de trata de personas
Con la esperanza de brindarles mejor educación y acceso a necesidades básicas miles de padres entregan a sus hijos para que vivan con otras personas.
Trasladar el cuidado y protección de hijas e hijos a otras personas o familias es una práctica frecuente y aceptada en muchas zonas de nuestro país. El deseo de brindar nuevas oportunidades a sus descendientes, impulsa a miles de personas a entregarlos a alguien a quien consideran honesto y comprometido con el buen desarrollo de los niños.
Lamentablemente, esta solidaria forma de relaciones humanas ha sido aprovechada por los tratantes de personas para captar fácilmente a víctimas menores de edad, generando vínculos falsos de confianza con las familias, lo que les permiten fungir como supuestos padrinos o compadres para sacar de sus hogares o comunidades de origen a las nuevas víctimas de explotación.
De acuerdo al Ministerio Público, el padrinazgo es una modalidad de captación recurrente, sobre todo en comunidades andinas y amazónicas. Al 2014 se registraron 30 casos de víctimas de trata de personas captadas de esta manera. Además, los tipos de explotación en los que terminan cayendo las víctimas son generalmente servidumbre en el servicio doméstico, mendicidad, explotación laboral, explotación sexual, entre otros.
“Para prevenir la trata de personas hay que conocer el delito y ser consciente de los daños que ocasiona (…) en las comunidades rurales la práctica ancestral del padrinazgo, en muchos casos le abre las puertas a los tratantes de personas; que la información llegue a estas comunidades, bajo una estrategia que considere el factor cultural, es clave” señaló Luis Aguilar, sub director de CHS Alternativo.
Rutas de la trata de personas en la Amazonía peruana , señala dentro de sus conclusiones el alto nivel de desconocimiento tanto del delito como de los derechos inherentes a las personas como ciudadanos. Si bien el IV Informe Alternativo señala que el Estado concentró sus esfuerzos en la prevención, éste esfuerzo solo llegó a un total de 1 millón 28 mil personas informadas que, por equivalencia, representa a la población del Callao en comparación a los 31 millones de habitantes que hay en el Perú; se puede decir que solo el 3.3% de los peruanos fue informado.
Preocupa que comunidades donde costumbres como el padrinazgo se practica, no reciban información sobre este delito; este descuido los deja frente a una condición de total vulnerabilidad siendo los menores de edad los más expuestos a ser víctimas de tratantes de personas. Consideramos que una labor de prevención sostenida que involucre a la escuela, medios de comunicación como la radio, y otros espacios de la comunidad, permitirá evitar que más niñas, niños y adolescentes caigan en esta modalidad de trata.