Una de las víctimas logró escapar y su declaración hizo posible que las autoridades gestionen un operativo en bares que se dedicaban a la venta de alcohol y explotación sexual. CHS Alternativo brindó asistencia y soporte a las jóvenes, y les realizó el descarte de COVID-19.

Pese a que hace tres años se realizó el operativo “Mercurio” contra la explotación sexual y trata de personas en la zona de La Pampa, en Madre de Dios, esta problemática sigue vigente en el lugar. Cuatro mujeres en situación de pobreza y con una necesidad económica urgente que habían sido captadas con falsas promesas de empleo fueron rescatadas de sus explotadores, el último fin de semana, tanto en este lugar como en la zona de Alegría. De inmediato, las autoridades locales se contactaron con CHS Alternativo para brindar a las víctimas asistencia y soporte profesional, ante lo cual la organización se hizo presente y realizó el descarte de COVID-19.

CHS Alternativo también procedió a hacer una entrevista a la primera víctima para conocer sus necesidades inmediatas, además de brindar orientación psicológica, apoyo para la reinserción laboral y asesoría legal, a fin de garantizar su acceso a la justicia. Se pudo conocer que la mujer se encontraba en situación de vulnerabilidad, pues tenía antecedentes de violencia sexual, estudios secundarios inconclusos y carga familiar. Fue captada a través de una falsa oferta de trabajo en donde le “ofrecían la oportunidad de ser ayudante de cocina con un sueldo de 2 mil soles mensuales”. Ella aceptó la oportunidad pensando que le podía asegurar un mejor futuro; sin embargo, al llegar a Madre de Dios, fue trasladada a un bar en la zona de La Pampa.

Nita Sakata, coordinadora de CHS Alternativo en la región Madre de Dios, relata que la víctima se da cuenta de la situación cuando la suben a un segundo piso y le dicen que se cambie y queda desconcertada. Se viste de blusa y pantalón, pero le indican que no puede trabajar así y le piden ponerse una falda más pequeña para dedicarse a vender cerveza, como dama de compañía y realizar trabajo sexual. Ante su negativa, la joven estuvo encerrada y sin comer. “Acertadamente ella nunca se despegó de su celular ni de su DNI y pudo contactar a un familiar, quien hizo diversas gestiones desde Lima para rescatarla”.

Sakata añade que la víctima relató que las jóvenes eran constantemente vigiladas. Sin embargo, ante el estado de ebriedad de los “cuidadores” y gracias al apoyo de otra víctima, pudo escapar con lo que tenía puesto. “Tuvo la suerte de su lado. Una de sus compañeras le dio 100 soles y le dijo que corra y no se detenga. Así tomó un bus y se contactó nuevamente con su familiar en Lima. Es ahí cuando le indican que la Fiscalía y la Policía tenían conocimiento del hecho y la intervendrían en el camino de escape. Gracias a esa intervención, las autoridades pudieron rescatar a las otras jóvenes”.

Una segunda víctima fue asistida por CHS Alternativo ante la convocatoria de las autoridades. Se trata de una mujer que escapó de un bar ubicado en el sector de Alegría y también tenía necesidades económicas, no contaba con soporte familiar y poseía carga familiar, ya que es madre de un niño. Ella, al igual que la primera víctima, recibió una falsa oferta de trabajo en Lima y se trasladó hasta Madre de Dios.

Las siguientes dos jóvenes rescatadas estaban en el mismo local de la primera víctima, en La Pampa. Tras la alerta, las autoridades organizaron un operativo de rescate inmediato. Ambas son mujeres jóvenes con necesidades económicas urgentes, sin trabajo y con carga familiar y también fueron captadas en Lima con falsas ofertas de empleo. En todos los casos CHS Alternativo realizó acciones de reintegración en favor de las víctimas.

¿Dónde pedir ayuda?

CHS Alternativo recordó que la trata de personas es un delito que está penado con cárcel. Indicó que ante el conocimiento o sospecha de una situación similar se pueden comunicar de manera gratuita y confidencial con el Ministerio del Interior, llamando al número 1818 desde un celular o teléfono fijo. También pueden comunicarse con nuestros Centro de Atención Legal y Psicosocial (CALP) en regiones: 945 092 929 o 992 013 265 (Lima), 995 290 010 (Loreto), 914 456 192 (Cusco), 982332804 (Madre de Dios) y 958 538 030 (Puno).

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