Desde CHS Alternativo hemos tenido contacto con las historias de vida de muchas víctimas de trata de personas; conocemos a través de ellas el proceso de captación, traslado y explotación al que son sometidas así como el rescate y procesos de reinserción al que logran de alguna manera, tener acceso.
Esta experiencia es la que nos impulsó a realizar una investigación de campo que nos llevó a recorrer 6,310.4 kilómetros de las tres principales rutas que emplean los tratantes en la Amazonía peruana:
Ruta 1: Santa Rosa (Leticia), Iquitos, Nauta, Yurimaguas, Tarapoto, Moyobamba, Nueva Cajamarca
Ruta 2: Huánuco, Tingo María, Pucallpa, Requena, Contamana, Nauta, Iquitos
Ruta 3: Cusco, Urcos, Ocongate, Quincemil, Mazuko, Huepetuhe, Delta 1, La Pampa, Puerto Maldonado.
Es cotidiano que los tratantes y sus víctimas recorran por cada una de ellas y nos dejen ver cómo las personas que son captadas con fines de explotación se convierten en parte de una cadena productiva donde a medida que aumenta su valor se le despoja de los derechos innatos a ella como ser humano, dejando de ser percibidas como personas para ser tratadas como objeto.
Con el fin de tener un panorama más preciso sobre el abordaje del problema desde las instituciones, entrevistamos a 60 personas entre funcionarios públicos, representantes de la sociedad civil y representantes de las organizaciones de base comunales; todo este proceso nos llevó a identificar los graves problemas que tiene el Estado para controlar este delito.
Las entrevistas, y visita a cada uno de los puntos escogidos para la investigación, nos reconfirman, sobre los modos de captación; se sigue recurriendo al padrinazgo, la migración y retorno, seducción, falsas ofertas de empleo y secuestro; como las formas más recurrentes para cometer este delito.
Por otro lado, constatamos que ciertos acontecimientos temporales generan mayor vulnerabilidad en los grupos de riesgo, es así que la estacionalidad de este delito nos dice que en periodos como las vacaciones escolares, fiestas patronales, temporadas de lluvias o de cosechas de papa y café, son las que generan mayor demanda de víctimas de trata de personas, por lo que se intensifica la captación por parte de los tratantes.
Sobre los prostibares que identificamos, centramos nuestra atención en cuatro cadenas enteras con casas matrices en algunos de los principales poblados mineros y sucursales en los campamentos más remotos, donde las víctimas vienen de familias con bajos ingresos económicos, exclusión de los servicios básicos del Estado, alcoholismo y abuso de drogas, abusos sexuales y violencia intrafamiliar además de pertenecer a grupos de poblaciones que han sido sometidas, durante siglos, a una discriminación social, racial, económica y política implacable que refleja un Estado ausente plagado de corrupción, informalidad y negligencia.
Rutas de la trata de personas en la Amazonía peruana, es un documento que nos muestra una realidad escondida, al parecer, por el mismo Estado; que se refleja en el nulo control de la Policía o del Ministerio de Transporte, que terminaron por eliminar los controles después de ser invadidos por la corrupción y, donde los transportistas no se preocupan por llevar registros sobre las personas a las que transportan ni exigen a los menores la documentación adecuada para viajar porque simplemente no le rinden cuentas a nadie.
Esta investigación nos mostró la falta de sensibilización y conocimiento en las autoridades cuyos discursos sobre el tema y sus funciones se confunden entre mitos y prejuicios, donde la PNP no es reconocida como institución confiable para combatir este delito y donde el débil nivel de coordinación y articulación entre las autoridades responsables a nivel de las provincias y distritos provoca, en muchos casos, que las víctimas que son regresadas a sus hogares nuevamente sean expuestas a sus tratantes.
CHS Alternativo pone el tema en agenda pública y política para generar mejoras en las estrategias de prevención y lucha contra la trata de personas, principalmente, pretende fortalecer la protección de las víctimas que hayan podido caer en estas redes de explotación que operan en la Amazonía, que en su mayoría son mujeres.
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