Nº 290 | ELVIA BARRIOS: TENEMOS QUE TENER JUECES ESPECIALIZADOS QUE CONOZCAN LA COMPLEJIDAD DEL DELITO DE TRATA DE PERSONAS


Elvia Barrios Alvarado es jueza suprema titular de la Corte Suprema del Perú, presidenta de la Sala Penal Transitoria y de la Comisión de Justicia de Género del Poder Judicial.

¿Cuál es la función del Poder Judicial en el proceso de atención de las víctimas de trata de personas?

El Poder Judicial desempeña un papel esencial en el acceso a la justicia de las víctimas de trata de personas. La función principal es impartir justicia a través de los juzgados jurisdiccionales. Eso significa llevar a cabo los procesos judiciales, sancionar los hechos, garantizar la protección de las víctimas y asegurarnos de que participen activamente del proceso. También ordenamos medidas de reparación y promovemos la sensibilización y capacitación de los jueces para mejorar el abordaje de estos casos.

¿Cómo se involucra la Comisión de Justicia de Género en este proceso?

La Comisión de Justicia de Género se enfoca en que todos los operadores de justicia trabajen con enfoque de género. De este modo, lo institucionalizamos en las áreas jurisdiccionales y administrativas. Esa es una política pública que nosotros seguimos a través de las capacitaciones permanentes, también utilizamos mecanismos para generar predictibilidad en este tipo de delito y orientamos en como (los jueces) deben interpretar la norma.

¿Por qué es necesario aplicar el enfoque de género en los casos de explotación humana?

El enfoque de género es fundamental para la prevención y para la intervención en los casos de trata de personas. Este delito afecta fundamentalmente a las mujeres. Entonces, al momento de tomar una decisión, el juez tiene que tener en cuenta la situación de vulnerabilidad en la que se encuentra víctima, tiene que eliminar estereotipos que afecten su integridad, tiene que dictar medidas de protección oportunas y evitar su revictimización durante el proceso legal. En términos más sencillos: las autoridades de justicia deben considerar que las mujeres victimas de violencia están en una situación de desventaja frente a su agresor y eliminar los estereotipos que se encargan de responsabilizarla por lo que sufrió. Además, el juez debe darle de inmediato una medida de protección a la víctima para alejarla de ese contexto criminal. Es ahí donde el enfoque de género es importante.

Desde el trabajo que realiza ¿qué factores de vulnerabilidad recurrentes se han encontrado en las víctimas de trata de personas?

El estado de pobreza, la falta de educación y el que no haya una política pública más fuerte para erradicar los factores de riesgos que tienen las víctimas.

En esa línea ¿qué se está haciendo desde el Poder Judicial para erradicar y sancionar este delito?

Hay varias cosas. Primero, tenemos que tener jueces especializados que conozcan la complejidad del delito de trata de personas y sus formas de explotación. Estos jueces tienen que conocer que en este tipo de delitos operan una multiplicidad de factores. Y la trata de personas es un delito pluriofensivo, con diversos puntos de participación, como la captación, el traslado, el transporte y la retención de las víctimas. Esas son formas de comisión del delito y a la par puede darse una multiplicidad de delitos. También tenemos un manual operativo para los casos de trata de personas, hacemos reuniones técnicas entre los operadores de justicia y fomentamos la transmisión de buenas practicas.

¿Y respecto a la prevención?

Educamos, sensibilizamos y comunicamos. Estamos comprometidos en la lucha contra la impunidad de este delito, por eso tenemos una articulación interinstitucional. El Poder Judicial no actúa solo, articula esfuerzos y tiene relaciones con otras instituciones. Por ejemplo, formamos parte de la Comisión Intersectorial –que es una comisión permanente– contra la trata de personas y el tráfico ilícito de migrantes.

Sobre el trabajo articulado con otras instituciones, ¿cómo es que se trabaja para que las víctimas de trata de personas accedan a la justicia y reparación?

Primero hay que entender que víctimas de trata son todas aquellas personas que han sido captadas, transportadas, trasladadas, retenidas y que son acogidas con fines de explotación. Teniendo en cuenta este proceso, en el Poder Judicial trabajamos con otros equipos y tenemos un equipo binacional de respuesta inmediata. Por ejemplo, si una peruana ha sido detectada como víctima de trata en un país como Ecuador, inmediatamente se hará la intervención y se coordinará entre las autoridades. Y en esa línea está la Policía Nacional, el Ministerio de la Mujer, la Defensa Publica del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, entre otras instituciones.

¿Qué estrategias se consideran para que las víctimas accedan a una reparación y no vuelvan al círculo de explotación?

Nosotros (Poder Judicial) hemos elaborado un manual operativo para el procesamiento penal de estos casos. Establecemos criterios a tomar en cuenta para que se repare adecuadamente a la víctima. Y hemos establecido cómo se debe estimar el daño moral en la indemnización de daños y perjuicios, así como cuantificar los daños materiales.

¿Qué se considera para la reparación?

El juez tiene que tener en cuenta la duración de la explotación, la edad de la víctima, las lesiones físicas o psicológicas que ha sufrido, cuáles son los antecedentes y cual era su situación de vulnerabilidad cuando fue captada. También tiene que tener en cuenta qué modalidad se utilizó para convertirla en víctima y los fines de la explotación. Para cuantificar los daños materiales, el juez tiene que tener en cuenta puntos que nos son fáciles de conocer. Entre ellos, el costo del tratamiento médico físico, psicológico y psiquiátrico de la afectada. Además, del costo de la terapia física y ocupacional, la rehabilitación que necesitará. También puede ser que la víctima no tenga un alojamiento, entonces los costos de transporte y alojamiento temporal se tienen que considerar; así como la perdida de los ingresos futuros por las pocas oportunidades de tener un trabajo o una fuente de ingresos. En la reparación se considera todo eso.

En el caso de víctimas menores de edad, cuando es la familia la que impulsó la explotación, ¿qué acciones se realizan?

El juez tiene que tener esto en cuenta y desarraigar a la víctima de ese contexto nocivo y ver su tratamiento en una casa adecuada.

En este contexto ¿cuáles son los desafíos que enfrenta el Poder Judicial para hacerle frente a este delito?

Desafíos hay muchos. El primero es tener en cuenta que los tratantes tienen una estructura conformada, en muchos casos vinculadas al crimen organizado e incrementan su sofisticación. Ellos están muy adaptados a la era digital. Sabemos que la tecnología es utilizada para captar a las víctimas y frente a ello, los jueces deben estar en la capacidad de dar respuesta a estas complejas formas delictivas en las que se presenta este delito. Es un desafío hacer un uso efectivo de los medios tecnológicos, porque buscamos que puedan servirnos para resolver con eficacia estos casos. La tecnología en las manos correctas puede aportar mucho en la resolución de casos de trata de personas.

¿Cree que la trata de personas se está convirtiendo en un tema cotidiano, en algo que la sociedad está normalizando?

La trata de personas tiene diferentes expresiones, no solo la explotación sexual (que es como se le asocia). Una de ellas es la explotación de menores bajo la finalidad del compadrazgo o madrinazgo. Se dice “Me llevo al joven a Lima para que estudie” pero se lleva al menor a trabajar en una casa en condiciones de explotación. Eso también lo vemos con la mendicidad. Y algo en lo que queremos llamar la atención es la modalidad de traslado. A menudo se interpreta el traslado como transporte y no es así. También esta en el padre o apoderado que entrega al menor para ser explotado. Esa persona también esta cometiendo el delito de trata. Pero hay algo que se tiene que analizar a futuro y que he advertido: la reproducción asistida.

¿Cómo esto podría estar vinculado a la trata de personas?

Si esta reproducción se convierte en un negocio y se convierte en la venta de niños, sería una nueva forma de criminalidad. Y en otros países, a estos niños podrían convertirlos en objetos sexuales. Es decir, este delito abre la multiplicidad de comportamientos anormales. Y aquí hay que tener muchísimo cuidado porque esta delincuencia se transforma, es camaleónica, maneja grandes cantidades de dinero y esta vinculada con otro tipo de delitos como la corrupción o el trafico de drogas. La trata de personas es un delito que se ramifica.

 

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