«Las leyes peruanas ven el tema de la trata desde la explotación laboral y sexual. Aún queda mucho por hacer sobre la venta de niños».
El 24 de abril del 2005, la pequeña Nicole de sólo cinco meses de edad fue separada de su madre, Angélica Rodríguez, cuando estaban en un terminal terrestre recogiendo una encomienda. Rodríguez había ido con Nicole y su hijo Alexis de 7 años a recoger un giro, cuando conoció a la ex enfermera Soraya Huatuco, quien luego de ganarse su confianza aprovechó un descuido de la madre para llevarse a la menor.
El abogado especializado en temas de trata, Carlos Romero, señaló que aunque la madre encontró en Junín a Huatuco, hasta la fecha se desconoce el paradero de Nicole. En tal sentido, sostuvo que la «lista negra» de casos no denunciados ha aumentado en los últimos años, y que si bien existe una ardua labor por combatir la trata de personas, el trabajo se ha enfocado más en lo que a explotación laboral y sexual respecta, pero que aún hay trabajo por realizar en cuanto a la venta de niños.
¿Luego de que la madre encontró a Huatuco, qué pasó?
Se siguió un proceso penal y se sentenció a Soraya Huatuco a 22 años de cárcel. Sin embargo, ella no está de acuerdo con la sentencia, pues hasta la fecha niega los cargos que se le imputan. Actualmente ella (Soraya Huatuco) ha impugnado y el caso se encuentra antes la Corte Suprema.
¿La venta de niños es un problema vigente en el país?
Claro que sí. Ahora no solo se da con secuestros, sino también con estas adopciones a escondidas. El problema es que en muchos casos los casos no son denunciados, por lo que son pocos los que salen a la luz pública y sirven como prueba de que este es un problema latente, como el caso de Nicoles, o el de Claudina Herrera, a quien le quitaron a su bebé del vientre.
Ahora, la manera como captan a los niños son dos, principalmente. Puede ser a través del secuestro, como fue el caso de Nicole, o robándolos de los centros de salud. Muchas de estas mafias tienen como cómplice a personal en los centros de salud, sobre todo a las obstetrices, quienes se aprovechan del estado vulnerable de las madres, y roban a los recién nacidos para luego venderlos. Es más, hace poco se conoció el caso de un médico chino que vendía niños en Miraflores.
¿Y qué es lo que pasa con estos niños una vez que son vendidos? ¿Cuál es el fin de la venta?
Puede ser la venta de órganos, la mendicidad o la explotación laboral. Sin embrago la mayoría de los casos de venta de niños tienen como fin el darlos en adopción a familias extranjeras. En algunos casos los compradores no saben de dónde proceden estos niños, pero son pocos quienes desconocen el origen. Hay que tener en cuenta que ellos (los adoptantes) están pagando un dinero a una persona para que les consigan un niño, por tanto saben que se está haciendo todo de manera informal e ilícita. Entonces, la responsabilidad va tanto del lado de quienes venden a los niños como de quienes los compran.
Hace unos días se detuvo a una banda de secuestradores en Moyobamba cuando intentaban llevarse a una bebé de 19 días de nacida. Los delincuentes fueron detenidos e incluso llevados al penal de Moyobamba. Sin embargo, se sabe que hoy ya están libres. ¿Las leyes son débiles que permiten liberar a los delincuentes?
En este caso no es necesariamente un problema de leyes, sino de la aplicación de las leyes. La pena de venta de niños está penada, en el Código Penal con 12 años como mínimo y 35 como máximo, pues se le considera un caso de trata agravado ya que se está violando la libertad de menores de edad.
El artículo 153, inciso a del Código Penal señala que si la víctima es menor de 14 años, la pena es de hasta 35 años de cárcel sin beneficios penitenciarios. Lo que puede haber pasado en ese caso es que el juez haya visto que no hay peligro de comparecencia, es decir de fuga, y por eso les ha dado la libertad, ya que nadie puede ser declarado culpable hasta que termine todo el proceso. Sin embargo, el juez debe ver que efectivamente no hay peligro de fuga, ya que son penas muy altas y lo más probable es que los implicados quieran escapar.
¿Existe un trabajo efectivo en la lucha contra la trata de personas?
En el país existe un grupo dedicado a la lucha contra la trata de personas que está presidido por el Ministerio del Interior, y en el que participan diferentes entidades del Estado y de la sociedad civil. Sin embargo, este trabajo se ha enfocado más en combatir la trata de personas con fines de explotación laboral o de explotación sexual. En cuanto a la venta de menores de edad, se ha hecho un trabajo pero aún quedan cosas por hacer.
Por ejemplo, debe haber un mayor trabajo con el Ministerio de Salud, y desde el Ministerio de Salud, con el personal médico que contratan, pues está comprobado que hay muchas obstetrices se dedican a la venta de menores. Asimismo, debe existir un trabajo articulado en el Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social, el cual se dedique a verificar todos los procesos de adopción, así como denunciar a aquellas personas que presenten indicios de ser tramitadores.
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