La venta de niños se encuentra prevista como uno de los fines de la trata de personas (Ley 28950), cuya pena según el tipo de víctima, puede llegar a no menos de 25 años.
De acuerdo al «Protocolo Facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño relativo a la venta de niños, la prostitución Infantil y la utilización de los niños en la pornografía» se entiende como tal a «todo acto o transacción en virtud del cual un niño es trasferido por una persona o grupo de personas a otra a cambio de remuneración o de cualquier otra retribución».
Hace unos días los medios de comunicación informaron sobre el intento de venta de un bebé de 19 días, cuya madre adolescente fue convencida de entregar a su hija a cambio de una suma de dinero.
Lo grave de la situación radica en que la organización criminal operaba en el propio Centro de Salud de Soritor – Moyobamaba, donde se le emitía un certificado de haber nacido vivo con datos falsos, que a su vez generaba una partida de nacimiento con la que era trasladado a otro lugar.
Solo ayer los medios de comunicación informaban también acerca del caso de una niña de 2 años que fue secuestrada y vendida, pero que finalmente logró ser rescatada en el terminal terrestre norte de Trujillo, cuando Jorge Luis Mora Contreras (50) «Monstruo Jorge» se disponía a trasladarla. Si esta persona es parte de una red de trata de personas queda aún por ser investigado.
Ambos casos recuerdan el caso de la niña Nicole que nos comenta el Dr. Romero en la entrevista central y donde muestra su preocupación por la insuficiente acción del Estado en este aspecto de la trata de personas.
Esto se corrobora si tomamos en cuenta que de 231 casos registrados en el sistema RETA PNP, solo 5 son por venta de niños (1 en el año 2007 y 4 en el año 2008).
En un monitoreo de casos, Mirada Ciudadana, encontró un patrón que empieza a ser recurrente en esta materia.
1. Las madres de las bebés son generalmente adolescentes o jóvenes en situación económica precaria o atraviesan problemas familiares por su embarazo temprano. Situación que preocupa si tenemos en cuenta que la tasa de embarazo adolescente asciende al 23 % del total de embarazos (Fuente ENDES continua 2007).
2. Las madres fueron captadas en establecimientos de salud de zonas periféricas, por mujeres que simulaban ser pacientes, incluso en algunos casos por personal que laboraba en éstos. Información a tener en cuenta si consideramos que para el año 2007 el MINSA contaba con 7,825 Centros y Puestos de Salud (Fuente MINSA 2007).
3. Los bebés fueron trasladados a otros puntos del país. Esta situación supera lo previsto en el Reglamento Nacional de Administración del Transporte (Decreto Supremo No. 019-2007-MTC) que prohíbe a las agencias «vender boletos de viaje a menores de edad que no sean identificados con su DNI o partida de nacimiento y que no cuenten con autorización de viaje cuando corresponda», pues algunos de los niños contaban con partida de nacimiento legalmente emitida pero con datos adulterados en los establecimientos de salud.
En algunos casos, los bebés fueron secuestrados aprovechando un descuido de sus padres o ganándose su confianza en lugares públicos. Estos fueron posteriormente vendidos.
Esto pone en evidencia que detrás de la trata de personas con fines de venta de niños, operan organizaciones criminales muy bien estructuradas que hacen más compleja la labor de prevención y sanción del delito. Están se vinculan con otras redes criminales transversales como la de falsificación de documentos, y con frecuencia recurren a la corrupción de funcionarios públicos para la emisión de documentos como partidas de nacimiento.
La complejidad de la problemática hace imprescindible construir una agenda especial para la trata con fines de venta de niños. De lo contrario estaremos viendo el árbol y perdiendo de vista el bosque.
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