Loreto es la región más extensa del Perú. Tiene una población de casi 100 mil habitantes. Sus actividades económicas predominantes son la agricultura, pesca y ganadería. Básicamente de sobrevivencia (6 de cada 10 loretanos viven en pobreza). Es como muchos lugares del país, un lugar olvidado o por descubrirse, depende como quiera las cosas.
Las casas que sufrieron la inundación aún se siguen cayendo sin una solución real, pero paradójicamente la tala de madera, es decir el mayor bien preciado en ese contexto, se ha convertido en una actividad furtiva que monte adentro es imposible de fiscalizar y controlar con los recursos actuales.
El precio de la madera y todo lo que implica (depredación, explotación, evasión fiscal, etc) es inmensamente inferior al que se paga por ella en Estados Unidos a donde se la lleva como materia prima. Madera que sale por el Amazonas en barcos cargueros hacia el Atlántico.
Hay un incremento de actividades extractivas (petróleo). Sin embargo las inspecciones laborales no llegan a este ámbito, tanto por falta de personal, como por la ausencia de una política real de fiscalización y control.
En ese contexto, el río Amazonas ha sido elegido como una maravilla natural del mundo. La Marca Perú promueve ahora a Loreto como parte de la loable estrategia comercial del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo para cumplir la meta de 3.6 millones al 2016.
La semana pasada se iniciaron los vuelos directos de Panamá a Iquitos. Lo que sin duda incrementará el número de turistas. Algunos de los más felices serán los vendedores de sexo con menores de edad. Que sin desparpajo ofrecen a sus víctimas en plena plaza de armas y por catálogo.
Han pasado cinco años desde que se sancionó a un cliente de sexo como menores de edad en Iquitos. La sentencia ha pasado a ser una pieza de museo. Algo extraño, poco común, ¿incapaz de repetirse?.
El PENTUR (Plan Nacional de Turismo) y la propia Ley General el Turismo establecen la obligación del Ejecutivo y del Gobierno Regional de incorporar una estrategia para evitar que se convierta en la Tailandia de América, pero aún no sabemos lo que hará. Por lo menos el anuncio del presidente olvidó esta parte de la política pública.
De lo contrario, niños, niñas y adolescentes serán presa fácil de los explotadores y traficantes de personas.
Según cifras del Sistema RETA, Loreto es una de las tres regiones con más víctimas de Trata de Personas. Hasta la actualidad se han registrado 65 casos de Trata de Personas y 163 víctimas en total, desde el 2004. Sin embargo, el tema del sub registro es evidente como bien lo señala en la entrevista de esta edición de Reporte Alternativo el Gerente de Desarrollo Social de la Región de Loreto.
Dada esta situación, las acciones del Estado para prevenir y combatir la Trata de Personas y la explotación sexual y laboral son más urgentes y más aún ahora que Loreto está en el ojo del mundo como destino turístico.
La Trata de Personas en Loreto
El delito de la Trata, así como la Explotación Sexual de Niñas y Niños Adolescentes (ESNNA) se concentra principalmente en la capital, Maynas. Uno de los factores es que se sitúa entre la frontera de Perú, Colombia y Brasil, es por esto que se hace más factible el traslado de víctimas por vía fluvial sin mayores controles.
Además, Maynas concentra las actividades extractivas de madera y petróleo, que genera un gran movimiento de mano de obra (casi la totalidad hombres), factor que aumenta la demanda de servicios sexuales.
Es decir, los factores van desde la pobreza en la región, los bajos niveles en la educación y falta de oportunidades laborales, además de la corrupción y la impunidad que contribuyen a que se haga invisible la problemática.
En relación a los problemas sociales que aquejan a la infancia y adolescencia, además del trabajo infantil, está la ESNNA (Explotación sexual de niños, niñas y adolescentes).
En ese sentido la organización Capital Humano y Social Alternativo viene desarrollando en esta región proyectos que contribuyan a mejorar el estado de los niños estibadores y recicladores. El proyecto trabaja con niñas, niños y adolescentes de 11 a 17 años trabajan como estibadores y recolectores de basura en los puertos fluviales de Maynas. Estos infantes realizan actividades económicas que por su naturaleza vulneran los derechos humanos.
Ellos con frecuencia son víctimas de algún tipo de violencia o abuso, y muchos de ellos viven en una situación de desprotección familiar, es por esto que muchos de ellos terminan siendo víctimas de explotación sexual y/o Trata de Personas.
Es relevante realizar este tipo de trabajos en Iquitos, debido a que la finalidad que predomina en la región es aquella con fines de explotación sexual, seguida de la Trata con fines de explotación laboral.
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