K volvió a casa tras ser secuestrada por un adulto que conoció en un videojuego


  • K salió de su casa para ir al dentista. No regresó hasta 10 días después. Fue captada por un “amigo” con el que jugaba en línea y que terminó siendo un explotador. Desde CHS Alternativo hacemos un llamado a la prevención.

16 mujeres desaparecen al día, según la Defensoría del Pueblo, la mayor parte son adolescentes y mujeres jóvenes. Una de ellas fue K, de 14 años. La niña iba al dentista en una zona concurrida del distrito de Miraflores, lugar donde se le vio por última vez. Al no regresar a casa tras varias horas, su familia puso la denuncia.

El Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) y el Ministerio del Interior MININTER) cumplieron con difundir la nota de alerta y comenzaron su búsqueda. El caso consiguió exposición mediática a través de redes sociales, lo que facilitó este proceso. No todas las personas desaparecidas cuentan con la misma suerte, en especial las que desaparecen fuera de Lima y en lugares “alejados” de las ciudades.

Sin embargo, con el pasar de los días y sin nuevas noticias, la hermana de K decidió indagar en la computadora de la adolescente. Allí encontró conversaciones que daban indicios de una posible relación más que amical entre su hermana y un “chico” que conoció jugando Free Fire, un conocido videojuego en línea.

Internet ¿oportunidad o riesgo?

Según el Reporte Global sobre la Trata de Personas 2020, en la última década el Internet se ha convertido en otra forma de captar a las víctimas, para  luego explotarlas y abusar de ellas.  Los más vulnerables siguen siendo niñas, niños y adolescentes.  En el estudio se explica que durante los últimos años el riesgo al que se ven expuestos los más jóvenes en el espacio virtual, especialmente en redes sociales, crece rápidamente.

Tras una investigación conjunta entre la familia de la adolescente, la presión ejercida desde redes sociales y el acompañamiento de diversas entidades del Estado, K fue encontrada en las afueras de Lima, cerca de Huacho, muy lejos de su casa.

“Mi hermana está muy mal, recibiendo apoyo de especialistas, pero mi familia quiere que esto no quede impune”, afirmó su hermana en un programa de televisión. K ya se encuentra en casa y a salvo, aunque muy asustada. El agresor de K tiene 25 años y ha sido denunciado previamente por el mismo delito: acoso sexual a una menor de edad.

Silvia Arispe, abogada y coordinadora del proyecto Bloquea la Explotación Sexual de CHS Alternativo comenta que:

“La pandemia ha hecho que casi todas las actividades de niñas, niños y adolescentes se trasladen al espacio digital. A mayor acceso, también más riesgos. En un estudio de CHS Alternativo, encontramos que el 42% de padres y madres afirmaron que sus hijos e hijas han enfrentado situaciones de riesgo vinculadas a la explotación sexual en línea. Esto se incrementó en 16% respecto del 2019.”

Lamentablemente el espacio digital se ha convertido en otro nicho para las personas explotadoras y organizaciones criminales para captar a sus potenciales víctimas. Y  donde se ubican las diversas modalidades de explotación sexual de niñas, niños y adolescentes (Esnna) en línea, tales como el grooming, sextorsión y la producción de material de abuso sexual de niñas, niños y adolescentes (MASNNA).

Es importante que los padres, madres y personas cuidadoras estén al tanto de los hábitos de uso del Internet de los menores a su cargo, para evitar situaciones de riesgo.

Comunicación para prevenir

El acceso al internet es un derecho para todas las personas, incluso niñas, niños y adolescentes. No obstante, su uso debe ser conversado y supervisado. Es importante tener diálogos abiertos entre los padres, madres y personas cuidadoras con sus hijos e hijas sobre el uso de las redes sociales, sus juegos favoritos y sobre sus “amistades virtuales”, así como establecer normas para un mejor aprovechamiento del espacio digital. Se sugiere también el uso de los los filtros y controles parentales, especialmente para los más pequeños.

La prevención es clave. CHS Alternativo, entre otros a través de su proyecto Bloquea la Explotación Sexual,  tiene como objetivo que historias como las de K no se repitan. A través de acciones de prevención y fortalecimiento de capacidades para personas cuidadoras y agentes operadores de justicia, la organización tiene la finalidad de evitar que niñas, niños y adolescentes sean captados para ser víctimas de alguna forma de explotación humana.

Conoce más sobre prevención, atención y denuncia de casos de violencia en línea en: chsalternativo.org/navegofresh

Si tú o alguien que conoces es víctima de una situación como esta, escríbenos al correo: atencion@chsalternativo.org

 

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