Entrevista a Susana Silva Hasembank – Jefa de la Inspectoría General del Ministerio del Interior.
Desde su experiencia previa de lucha contra la corrupción, ¿Qué situaciones considera prioridad para enfrentar la corrupción dentro de la Policía Nacional y el Ministerio del Interior?
De todo el cien por ciento de denuncias y casos de corrupción que se registran de la Policía Nacional, se sabe que un altísimo porcentaje están vinculados a cohecho, es decir coimas y sobornos los cuales son considerados como micro corrupción, y de estos casi el cincuenta por ciento están vinculados con coimas que se realizan en el ámbito del tránsito y transporte urbano; por ello nosotros vamos a poner todos nuestros esfuerzos en combatir esta micro corrupción, desarrollando estrategias de investigación, prevención y sanción también para erradicar estas malas prácticas.
¿Qué tipo de herramientas o sistemas tiene la Inspectoría General para detectar casos de corrupción y crimen organizado dentro de la Policía Nacional y dependencias del ministerio del Interior?
Una herramienta que nos está resultando muy útil es la línea 1818 donde se puede reportar denuncias por corrupción; sin embargo, aquí en la Inspectoría no queremos ser solamente reactivos, no nos vamos a quedar con los brazos cruzados esperando a que se den esas denuncias, ya de antemano sabemos que existen áreas sensibles dentro de la Policía Nacional y del Ministerio del Interior, donde está presente la corrupción, aquí no vamos a esperar que haya un escándalo mediático o que alguien nos diga que está pasando algo, vamos a trabajar y utilizar mucho el trabajo de inteligencia, porque la inteligencia es una herramienta sumamente valiosa, sumamente potente, para desbaratar organizaciones delictivas que puedan existir al interior de una entidad; tenemos que dar un mensaje claro que estamos trabajando para erradicar esa micro corrupción, esa pequeña corrupción que esta tan presente aquí en la Policía Nacional.
En caso de que un policía esté vinculado con redes de trata de personas, ¿Qué sanción merecería? ¿Podría el Ministerio del Interior empezar acciones penales?
La policía tiene como principal función dar protección y con ello dar seguridad a la ciudadanía, ese es el espíritu del servicio de la Policía Nacional, que un servidor policial esté involucrado en actos ilícitos, que atenten contra esos principios es totalmente inadmisible y desde aquí, del Ministerio del Interior, se van a aplicar y se va a exigir a todas las dependencias y los órganos disciplinarios que se apliquen las sanciones más rigurosas, las cuales no solo será desde el ámbito administrativo, con el pase a la situación de retiro, también al constituir un delito contemplado en el código penal, va a tener que ser ventilado en el Poder Judicial; el Ministerio Público intervendrá a través de la Procuraduría, sin perjuicio de lo que se haga a nivel administrativo, es así como venimos trabajando.
¿Cómo se podría catalogar la inacción en muchos casos de vínculos entre la Policía Nacional y bandas de crimen organizado?
Nosotros no descartamos que haya malas conductas a pesar de los esfuerzos que se hace, pero lo que no vamos a permitir es que haya impunidad en nuestra sociedad y en todos los países del mundo, aún los más avanzados como Finlandia, Alemania, Inglaterra, donde tienen un sistema anti corrupción muy efectivo, la corrupción siempre aparece, por ello es una amenaza permanente y tenemos que estar alertas también de manera permanente. Por ello si ocurre, a pesar de los esfuerzos que nosotros vamos a emprender, no vamos a permitir que exista impunidad, el mensaje de no impunidad es clave, tiene un efecto disuasivo, de generar una consciencia de que la corrupción si se paga.
Hace algunos días vimos en los medios el caso de un menor de 14 años que denunciaba a un hombre por acoso sexual; en la comisaría de Barranco le dijeron que no podía proceder la denuncia por que no hubo “consumación del delito”, ¿Cómo devolver la confianza de la ciudadanía en el accionar de la policía si ellos no actúan como deberían frente a este tipo de denuncias?
Más allá de que sea posible o no poder detener a una persona que está acosando a un menor, yo creo que la comisaría y el personal policial sí deberían brindar una atención, una protección inmediata llamando al Ministerio Público; algo que no podemos permitir es un trato displicente de parte de la policía; sin duda hay limitaciones de naturaleza en materia de recursos humanos, en logística o presupuestales, pero lo que no puede permitir el ciudadano, es que haya un desgano de parte de la policía o un desinterés de atenderlo y brindarle protección. Estos no son temas menores, porque marca mucho la diferencia entre la legitimidad que la ciudadanía puede tener o no frente a la policía.
Qué opinión le merece la inacción de muchos funcionarios del Ministerio Público y de la Policía Nacional frente a normas y reglamentos que detallan sus obligaciones como por ejemplo la oportuna difusión de las cifras del Sistema RETA.
Sabemos que aún hay deficiencias en el uso y la implementación de este registro, así como un conocimiento insuficiente, sin embargo, en esta gestión, tanto desde la Inspectoría, que está a mi cargo, como el propio Ministro del Interior, estamos firmemente comprometidos en cumplir la normatividad en todo lo referente al tema de lucha frontal contra la criminalidad organizada pero particularmente en el tema de trata de personas y esto no solamente porque este contemplado en una directiva o una normatividad, si no también porque existe una voluntad de hacerlo, sobretodo porque la trata de personas es una modalidad delictiva altamente lesiva que requiere de todos los esfuerzos para combatirla.
Comentarios Finales
Desde el Ministerio del Interior hay un compromiso institucional y también personal; el Ministro, al igual que yo, es una persona honesta y que tiene un convencimiento pleno de que la lucha contra la corrupción debe ser vista como una inversión en la gestión pública cuyos resultados no se ven de la noche a la mañana, se ven a mediano o largo plazo, a veces puede resultar frustrante, nosotros lo sabemos, pero va rindiendo sus frutos.
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