Trata de Personas: el Ministerio de Seguridad asesoró a la Policía Nacional del Perú


“Es un desafío lograr identificar, acceder al modus operandi y desarticular una organización que se dedica a la Trata de Personas. Tiene un grado de complejidad absoluto y supone un riesgo para quienes avanzan en este tipo de investigación y neutralización del delito. En algunos casos hay que buscar formas alternativas y sumamente sutiles de investigación para registrar, por ejemplo, las modalidades de captación, entre otras, a través de las redes sociales sin vulnerar los derechos de las personas y siguiendo protocolos serios y sólidos”, explicó Juan Manuel Vijuesca, quien agregó: “este tipo de delitos requiere una coordinación y una articulación muy importante”.

Durante la capacitación, además, se compararon diversos aspectos vinculados con la utilización de las llamadas “técnicas especiales de investigación”, en específico las figuras del “agente encubierto” y “agente especial o revelador” en ambos países como parte de la colaboración que las fuerzas de seguridad pueden brindar a la Justicia, una vez que ésta ordena ese tipo de acción. Al respecto, se analizaron las fortalezas y debilidades que acarrean estas acciones en una investigación y los marcos normativos que regulan sus condiciones de posibilidad y proporcionalidad.

Dicha articulación para la intervención de esta cartera en el curso “Guía Operativa para la investigación del delito de Trata de Personas”, fue llevada a cabo por Patricia Bustamente, directora de Investigaciones contra la Trata de Personas y Delitos contra la Integridad Sexual, dependiente de la subsecretaría de Investigación Criminal y Cooperación Judicial que conduce Valentina Novick. La actividad, además, contó con las exposiciones de los expertos Juan Manuel Vijuesca, responsable del Registro de Informantes y técnicas especiales de investigación de la Ley 27.319, y el Comisario Néstor Hugo Coria, perteneciente al Departamento Unidad Federal de Investigación sobre Trata de Personas de la Policía Federal Argentina.

“Es un desafío lograr identificar, acceder al modus operandi y desarticular una organización que se dedica a la Trata de Personas. Tiene un grado de complejidad absoluto y supone un riesgo para quienes avanzan en este tipo de investigación y neutralización del delito. En algunos casos hay que buscar formas alternativas y sumamente sutiles de investigación para registrar, por ejemplo, las modalidades de captación, entre otras, a través de las redes sociales sin vulnerar los derechos de las personas y siguiendo protocolos serios y sólidos”, explicó Juan Manuel Vijuesca, quien agregó: “este tipo de delitos requiere una coordinación y una articulación muy importante”.

Durante la capacitación, además, se compararon diversos aspectos vinculados con la utilización de las llamadas “técnicas especiales de investigación”, en específico las figuras del “agente encubierto” y “agente especial o revelador” en ambos países como parte de la colaboración que las fuerzas de seguridad pueden brindar a la Justicia, una vez que ésta ordena ese tipo de acción. Al respecto, se analizaron las fortalezas y debilidades que acarrean estas acciones en una investigación y los marcos normativos que regulan sus condiciones de posibilidad y proporcionalidad.

Fuente: Gobierno Argentino

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